Del roce nace el parte

Hace 8 meses

Antonio, de Madrid

Tengo contratado todo riesgo y coche de sustitución (aunque en esta ocasión no fue preciso). Tenía un sin fin de roces de aparcamiento y otras «gracias» del prójimo. Me facilitaron en MAPFRE cuantas sugerencias fueron precisas para la más completa subsanación y, además, la elección de taller que cumplió en plazo y perfección la reparación a realizar. En apenas dos días tenía el coche en mi poder. Gracias.