Los nuevos apóstoles
Hace 3 años
Mª Victoria, de Tenerife
Es inevitable hablar con amigos y familiares de los diferentes seguros; coberturas, atención directa, asesoramiento y, por supuesto, el precio. En casa no estábamos conformes con lo que pagábamos y las subidas desorbitadas. Un día en el trabajo, hablando con los compañeros, me hablaron de MAPFRE, habían formado una cadena de asegurados satisfechos. Cuando llegué a casa empecé a realizar algunas gestiones y el resultado fue el cambio a esta compañía. Vamos, lo volvería a hacer. ¿Cómo no se me ocurrió antes? la importancia del «boca a boca», de la satisfacción de los clientes… la mejor promoción.