Todo el tiempo que soñé con volver
Mar, de Madrid
Después de un 2020 en casa y con el coche guardado, llega el momento de retomar, de volver a la carretera. Planes en mano, llega el momento de coger las gafas, las llaves del coche, los documentos… ¡el seguro!, ay, ay, ay, dejo las llaves, me quitó las gafas, compruebo los documentos y veo que está fuera de plazo. Tranquila y segura, miro el ordenador y me abalanzo sobre él para invocar a Mr. Google. “Búsqueda: seguros pago plazos coche”, una lista de aseguradoras me daba a pensar que podría tener más opciones de las que me imaginé, bieeeen. Entro en la primera, respondo las preguntas y al final, precios elevados, sin opción a pago aplazado. ¿Pero es que escribí mal la búsqueda?, vuelvo atrás y filtro más fino “contratar seguro para coches pago aplazado”, vuelvo a intentar y vuelve a aparecer la misma lista, emocionada hago click en la primera opción, respondo las preguntas y lo mismo, montos altos, con una póliza en el marco sólo de lo legal, conductor adicional incrementa cuota, sin derecho a pago aplazado. En unas 6 ó 7 lo intenté y se repetía el resultado.Entonces pensé que no existía lo que buscaba, ni siquiera aquella aseguradora que tanto promocionaba el pago en cuotas por TV me daba la opción. Buah, qué decepción. Recordé que para el seguro de mi perro uno de los mejores era MAPFRE, sobre todo porque era de los más flexibles del mercado y quise probar, deslicé el ratón hasta el link, hice click y fui respondiendo a las preguntas.Sin darme cuenta, me estaba pidiendo el número de tarjeta para el pago y yo creía que estaba en el cielo de las soluciones, un poco incrédula pero con esperanza, seguí adelante hasta el final y ahora tengo mi coche asegurado, sin más que correos de confirmación, clicks y una llamada que se me hizo al día siguiente. No podía creerlo, guardé mis archivos pdf, imprimí una página de la póliza (hay que ahorrar tinta y papel), cerré la tapa del ordenador, me fui hasta la puerta, me puse las gafas, cogí las llaves y salí de casa con dirección al coche para volver a la carretera. El día empezaba bien.